Peñarol superó a Libertad por un ajustado 82 a 77 y se metió en las semis del Súper 8, en Mendoza. Este viernes chocará con el campeón Regatas por un lugar en la final.
Sufrió y no estuvo del todo fino, pero cuando tuvo que apretar lo hizo. Así es Peñarol. Puede no tener la mejor noche, pero tiene la jerarquía suficiente para sacar la situación adelante. Así fue que superó a Libertad por 82-77 para meterse en la semifinal del Súper 8 de Mendoza. Este viernes, a las 21 (TyC Sports), partidazo de los candidatos por un lugar en la final: el Milrayita contra el campeón Regatas.
No fue un buen primer tiempo. Ninguno pudo seguir una línea de juego, perdieron muchas pelotas (19 entre los dos) y se equivocaron y apuraron mucho a la hora de tomas decisiones. En esa sintonía, Peñarol fue más por jerarquía de personal. Apagado Campazzo (1-8 cancha), fueron Boccia (diez puntos), punzante como siempre, Leo Gutiérrez (tres bombas) y Gaby Fernández (8, dos triples) los que llevaron la manija. El Milrayita tuvo su máxima en el cierre del 2º (41-33), pero Fernández Chávez arrimó desde 6.75 metros.
El 3º fue un bombardeo. Cuando el Tigre lo empató, Peña contestó con parcial de 16-3 con dos triples de Leo y uno de Facu (fueron cinco en el cuarto) para la máxima (57-44). Pero los de Duró arrimaron (62-56) con bombas de Barrios (dos) y Fernández Chávez. Y la siguieron: ráfaga de 7-0 para quedar a tres (66-63) y una seguidilla terrible de nueve puntos de García para empatarlo a 3m15 (72-72). Pero Peña sacó el fuego interior: doble fácil de Boccia, triplazo de Weigand, dos tapas de Leiva y un par de pérdidas del rival sellaron la historia para los de Mardel. Y a pensar en la semi perfecta.
Fuente: Diario olé
