Después del papelón de Delfino, los dirigentes se movieron en la Conmebol y consiguieron al árbitro de su preferencia para la revancha del jueves. Y ahora...
El Delfinazo puede costarle más caro a River que a Boca. Cuesta creerlo después del bochornoso arbitraje del jueves en el Monumental, donde el equipo de Gallardo tuvo otra vez bandera verde para pegar y Vangioni, Funes Mori y Sánchez jugaron de regalo, pero la CD de Boca se movió rápido y sin levantar la perdiz, pero con pruebas más que suficientes y concretas, ganó la batalla en los escritorios de cara al partido de vuelta. Darío Herrera, el juez que el Xeneize viene pidiendo desde que se conocieron los cruces de octavos de la Libertadores, y con quien está invicto en partidos oficiales, será el encargado de impartir justicia en el desquite en la Bombonera. Ceballos, el que querían Núñez, será el árbitro suplente. Siempre es bueno llegar ganando...
No fue fácil para Angelici y cía. convencer a las autoridades de la Conmebol, que hasta el viernes por la noche, el día en que debían conocerse las designaciones arbitrales para los encuentros de esta semana, se mantenía firme en su postura de escoger por Pitana, el más temido en el Mundo Boca después del Súper del Final 2014, cuando el misionero inventó un corner que derivó en el 1-2 sobre el final y omitió un agarrón de grosero de Balanta a Gago, entre otras polémicas. Herrera siempre estuvo en consideración, pero siempre corrió de atrás. No cerraba su inexperiencia y mucho menos después del papelón de Delfino. Boca lo había propuesto, pero Abel Gnecco, presidente de la Escuela de Arbitros de la AFA y representante argentino en la Comisión de Arbitros de la Conmebol, presentó sus propios candidatos y recomendó a Delfino y Pitana. La Conmebol suele atender la opinión de sus consejeros, pero esta vez le dio la espalda. Sabía que a Boca le debía una.
Herrera (30 años, del Sadra), dirigirá su primer superclásico y también será su primer partido como internacional. Lo secundarán los líneas Hernán Maidana (aquel que no vio offside de Teo en el 1-2 del 2014) y Juan Belatti. Debutó en abril de 2013 en un Colón-Vélez y dirigió seis veces al Xeneize, con buenas actuaciones. Cinco fueron triunfos: 2-1 ante Tigre (expulsó bien a Pérez García por adelantarse en la barrera y simular), 2-0 a Olimpo (acertó en sancionar un penal de Furios a Insúa); 2-1 a Central (echó a Acevedo por un codazo a Gigliotti); 3-1 al Rojo (no compró una simulación de Carrizo adentro del área) y 1-0 a Rafaela, el único antecedente en este torneo (acertó en la roja a Serrano por una dura falta a Lodeiro). La única parda fue el 0-0 ante Quilmes del Final 2014, cuando controló bien el partido. En Boca todos le tienen fe. Y sí, Herrera el que querían...
Fuente: Diario Olé.
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