Campeón sin vencimiento

Con 44 años, el Gordo Domínguez puede ser récord: el sábado buscará recuperar el cetro ante Matías Vidondo para ser el monarca más veterano.

Hace 17 meses, con el DNI cantando 43 pirulos, Marcelo Domínguez volvió a calzarse los guantes. El ex campeón crucero CMB dejaba atrás siete años de inactividad porque sentía vivo el fuego del peleador. Aquella noche del 3 de mayo del 2013 en el club Banade de Martínez, el Gordo sacó en siete rounds al chaqueño Alfredo Ruiz Díaz pesando 105,300 kilos y demostrando que sus reflejos estaban a full. Al borde del ring dejó, convencido, un par de promesas: “Voy a volver a ganarle a la Mole Moli para recuperar el título argentino de los pesados y, si el cuerpo me ayuda, voy a volver a dar los 91,200 kg de crucero”.

Tras hilar otras cinco victorias, la batalla con la balanza está casi decidida a su favor ya que en su última presentación, en junio ante el paraguayo Javier Corrales, registró 94,700 kg. “Si hubiera sido por un título, apretaba el acelerador en la última semana y daba crucero. Pero como sabía que se estaba cocinando el combate por el nacional pesado, paré la mano”, aseguró.

Cumplir con el primer objetivo se complicó un poco más porque el cordobés Moli perdió el cetro el 30 de agosto del 2013 tras caer por descalificación ante Matías Vidondo luego de pegarle cuando estaba en la lona. Domínguez debió cambiar de target y ahora apuntó los cañones al grandote Vidondo (mide 1,94 metro, lo mismo que Moli), quien el sábado expondrá por segunda vez el cetro nacional de los pesados en el estadio del club Independiente de su Neuquén natal. “Es un tipo con experiencia que merece todo mi respeto”, anticipó Vidondo (19-1-1, 17 KO-1 PKO), un ex jugador de vóley que también cursó estudios de medicina en Rosario.

Para Domínguez (47-7-1, 25 KO-1 PKO), el desafío tiene un toque de orgullo: “Quiero recuperar el título que tuve entre 2002 y 2006 y que dejé cuando decidí retirarme”. Además, el porteño sabe que un triunfo lo hará ingresar en los libros de récords, ya que de coronarse con 44 años será en el campeón argentino de más edad. Hasta aquí la marca le corresponde al bonaerense Ricardo Silva quien inició su quinto reinado en peso ligero ante Víctor Hugo Castro en el 2004 con 42 años. “El documento no es problema para mí. Físicamente y de la cabeza me siento hecho un pibe. Y tengo 25 años de experiencia en el boxeo”, dijo Domínguez, quien mañana viajará a la sede del combate.

Fuente: Diario Olé