Para la historia

PSG 2 - CHELSEA 2

Hazaña del Paris Saint Germain: avanzó a los cuartos de la Champions al empatar 2-2 en Stamford Bridge y eliminar así al Chelsea de Mourinho, que jugó desde los 30 minutos con uno más por la expulsión (injusta) de Ibrahimovic. Gran partido de Pastore.



Fue un partidazo. De esos que quedan en la historia. Epico. Una verdadera hazaña la que consiguió el Paris Saint Germain. En Stamford Bridge, el conjunto francés dirigido por Laurent Blanc sacó pecho y se dio un gustazo enorme: avanzó a los cuartos de final de la Champions League eliminando nada menos que al Chelsea del excéntrico Mourinho. ¡Qué tal!

Lo que engrandece la gesta del PSG es la condición adversa que sufrió al quedarse injustamente con uno menos por la expulsión de Zlatan Ibrahimovic. Sí, a los 31 minutos de juego, cuando era superior al local, su mejor jugador vio la roja por un foul que era para amarilla. Condicionado, el mérito del visitante fue no bajar los brazos. Incluso, la diferencia numérica no se notó porque el Chelsea nunca se dio cuenta de que debía ir a cerrar la serie. Y el PSG, jugado por jugado, apostó a buscar ese gol que le diera la clasificación. Con un Verrati enorme que se comió la mitad de la cancha y con un Pastore muy fino que desequilibró con su precisión en los pases, mereció el 1-0. Y lo tuvo en el segundo tiempo con un mano a mano de Cavani. El uruguayo gambeteó a Courtois y definió de zurda: la pelota pegó en el palo, cruzó toda el área y se fue por el otro lado. Increíble.

Como si fuera poco, el árbitro holandés Kuipers seguía equivocándose. En el primer tiempo, además de exagerar en la roja a Ibra, no vio un penal que le cometió Cavani a Diego Costa. Al delantero del Chelsea debió echarlo en el segundo tiempo por una infracción similar a la de Zlatan. Pero le sacó amarilla...

Sin embargo, por esas cosas que tiene el fútbol, fue el local el que abrió el marcador. Cahill pescó un rebote en el área rival y metió el derechazo para el 1 a 0. Había olor a asunto sellado, pero el PSG, con los cambios ofensivos que metió Blanc, fue a buscar el empate y lo logró con un soberbio cabezazo de David Luiz, lo que llevó el partido al alargue ya que en la ida también habían igualado 1 a 1.

Así como tuvo un regalito del juez, ya en el tiempo suplementario, los de Mou recibieron otro obsequio pero de Thiago Silva. El defensor brasileño, capitán del PSG, cometió un penal infantil al tocar la pelota con la mano dentro de su área. Hazard metió el 2-1 y ahí sí, dio la impresión de que no habría sorpresas. Pero si algo le faltaba al partido era la revancha del defensor de la selección brasileña. En un corner fue al área rival y metió un cabezazo tremendo que hizo inútil la estirada de Courtois. Gol para silenciar a todo un estadio y para darle la clasificación a su equipo a los cuartos. In your face, Mou...

Fuente: Olé.