Argentina se prepara para el Mundial

Argentina arrancó con todo su preparación en San Luis y derrotó 77-58 a Uruguay.

“Este Sudamericano es nuestro Juego Olímpico”. Así graficó Nico Casalánguida la importancia de esta Selección con presente y más futuro, que hace 10 días empezó a prepararse para el torneo de Isla Margarita (24 al 28) y el sábado tuvo su primer amistoso en la bella capital puntana. La idea es seguir rodando esta base joven y con talento, clasificarse a los Panamericanos y Preolímpico y buscar quienes den una mano en el Mundial. Y, en el camino, el DT intenta armar un equipo con una identidad y, en el triunfo ante Uruguay por 77-58, comenzó a verse mucho de estas intenciones del técnico.

Un conjunto cuyo sello será la defensa, aprovechando la agresividad que puede darle la juventud, la rotación constante de jugadores y la capacidad atlética. Uruguay lo sufrió. Sólo hizo 58 puntos, con 39% de cancha y 17 pérdidas. La otra idea, a partir de una marca asfixiante, es correr y anotar puntos fáciles. Argentina también lo logró. La otra es usar el pase como arma esencial, gracias a la solidaridad y habilidad del conjunto.

Y, mientras se buscan las armas principales, jugar profundo con Leiva (8 puntos) y Delía (7). Ayer se notó que Laprovittola será un baluarte (22), tras su experiencia en Brasil que lo hizo más ofensivo. Safar, con su tiro, será amenaza. Pero luego muchos pueden aportar sus puntos, con tiros, en la contra, desde el rebote o cortes. Lo mostraron Espinoza (muy agresivo, como en el Premundial: 9) y Giorgetti (11).

Casalánguida probó bastante y ya en el primer tiempo usó a los 12. Los más pibes (hay cinco debutantes) tuvieron sus chances y respondieron, sobre todo Delía, Giorgetti, Brussino y Bortolín. El coach jugó con dos torres (Leiva y Delía) y equipos muy altos, con cuatro jugadores de más de 2m00. Mata, por caso, aún falto de ritmo, fue utilizado de escolta, un poco pensando en el Mundial, por la posible baja de Delfino. Uruguay, sin Batista ni García Morales, peleó como le gusta a su historia y al DT Capelli, pero Argentina lo maniató defensivamente y jugando con el sello de la Generacón Dorada, con pases, variantes y sin egoísmos. Falta en ataque, pero quedan 14 días. Gran primer paso, el lunes en Villa Mercedes será el segundo. Podemos ilusionarnos.

EL PRIMER TIEMPO

El arranque tuvo a un sorpresivo Uruguay, con buena movilidad de pelota y mucha eficacia para irse arriba 9-2 en tres minutos. Pero Casalánguida pidió minuto, retó a sus muchachos y Argentina empezó a ser otra. Primero desde la defensa. El DT, a los gritos, pedía que negaran los pases, que presionaran y cortaran primera línea. Y así empezó a frustrar al ataque uruguayo, que apenas pudo anotar 15 puntos en los 17 minutos restantes. La presión fue tal que le permitió correr y anotar puntos fáciles. En ofensiva fija se enfocó en pasarse más la pelota y jugar más profundo con Delía y Leiva. Así lo ganó por 36-24.

Laprovittola ratificó que la experiencia en Brasil lo puso más agresivo para el aro y fue la principal vía de gol, con 14 puntos. Pero también fue muy bueno lo de Espinoza, defendiendo con agresividad, corriendo, yendo al rebote y cortando el aro (8). Leiva hizo pesar su potencia y además la pasó bien. Y valió la prueba de Mata como escolta, pensando en el Sudamericano pero sobre todo en el Mundial.

SEGUNDO TIEMPO

Comenzó con la agresividad defensiva uruguaya que permitió un parcial de 8-2 en cinco minutos. Pero Casalánguida metió mano en el banco y encontró respuesta para volver a sacar diez. En el último cuarto el equipo terminó de maniatar a Uruguay y se soltaron todos, sobre todo Giorgetti, quien cerró con 14 puntos. Aún con trabajo para realizar en ataque, la Selección ilusionó con su defensa. 

Fuente: diario Olé.