El Barcelona se floreó ante el débil Almería, lo venció 4 a 0 y se aseguró mantener la distancia con el Real Madrid. Lionel Messi abrió el marcador con una definición exquisita. Luis Suárez en dos ocasiones y Barta completaron la goleada
No suponía un gran desafío para el Barcelona. Recibía en su casa a un Almería que coquetea con los puestos de descenso y que hacía siete fechas que no ganaba. Finalmente, y como era de esperarse, el Camp Nou fue testigo de una nueva fiesta del equipo de Luis Enrique, que le ganó 4 a 0 a su rival y se mantiene bien arriba en las posiciones. Lionel Messi abrió la goleada con un zurdazo inalcanzable para Julián, y luego Luis Suárez por duplicado y Barta, sentenciaron la historia.
Los andaluces llegaron con la clara intención de rescatar al menos un punto, se plantaron con dos líneas de cuatro bien pegadas, se dedicaron a defender y le entregó la posesión al Barsa, que en los primeros minutos no le encontraba la vuelta al cerrojo que impuso la visita. Pero cuando todo se hacía cuesta arriba, apareció él para abrir el arco. Típica jugada de Messi: arrancó desde la derecha, apiló rivales, zurdazo esquinado y 1 a 0. No fue un gol, fue un golazo. A partir de allí, monólogo del elenco Culé. Sólo quedaba esperar cuantos goles terminaría haciendo.
La segunda mitad, con un Almería resignado, Bartra de cabeza y Luis Suárez, primero con un gol a lo Leo y luego empujando un centro de Pedro, liquidaron el pleito, que le permite al Barcelona asegurar la diferencia con el Real Madrid y mantenrse más puntero que nunca de la Liga.
Fuente: Diario Olé
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